Sin duda, lo que nos define como Institución, es el accionar o la práctica educativa, centrada en los primeros años de la infancia del niño.
En nuestra labor educativa aspiramos a formar un niño que se realice en plenitud como persona, que en el interactuar diario vaya descubriendo las pautas necesarias para vivir en sociedad, donde el límite aparezca como un marco necesario y natural.
El afecto es, sin dudas,
la esencia, la base para poder desarrollar ese poder educativo.
Deseamos una escuela democrática, innovadora, atendiendo las diferencias.
Un Jardín basado en el lema
"un lugar para la integración orgánica y creativa de valores, de objetivos concretos y de ideales comunes"; sintetizando en
"Un lugar para crecer...".Para ello trataremos que los niños internalicen aquellos valores capaces de promover, en el futuro, actitudes positivas y enriquecedoras.
Un lugar donde se respeten los puntos de vista, se establezcan con claridad los acuerdos y se intenten superar con el mayor consenso las controversias.
Tratar de que la labor educativa trascienda a la sociedad procurando la interacción de todos sus miembros.
Propiciar situaciones de aprendizaje colectivas, donde se establezca un diálogo constante entre los actores de la
Institución y se arribe a cambios, tendientes a mejorar las prácticas docentes.
Llegar a lograr una coherencia entre los rasgos de esa identidad, la oferta educativa que se hace y el tipo de funcionamiento y organización que tiene el establecimiento educativo.
Seguir trabajando con el mismo compromiso para lograr una gestion cooperativa, global y coherente, reforzando la modalidad de
Jardín Nucleado.